Existen diferentes tipos de cámaras termográficas en el mercado, debes elegir en función de tus necesidades y presupuesto. ¡Conócelos!
La crisis actual derivada de la pandemia del COVID-19, ha ocasionado la implementación de nuevas normas de sanidad obligatorias para convivir sin arriesgar nuestra salud. Una de ellas, es la detección anticipada de fiebre.
¿Cómo acelerar la toma de temperatura cuando un grupo de personas quiere acceder al mismo tiempo a tus instalaciones? Esto se convierte en una problemática grave a la hora de gestionar el ingreso del personal y si el movimiento es constante, aún peor.
Por suerte, la tecnología ya creó una solución a la medida. Se trata de las cámaras termográficas, las cuales captan cualquier nivel alto de calor sin necesidad de contacto. Una gran diferencia en eficacia y automatización, si las comparamos con los termómetros digitales.
Hay varios tipos de cámaras termográficas, pero las principales son la cámara portátil, la cámara tipo turret y la cámara Bala. Sus características pueden definir la opción que mejor se adecúe a tus necesidades.
La cámara portátil TP21B tiene la capacidad para conectarse en PC o teléfono inteligente para notificar a los operadores cuando detectan una temperatura elevada. Tiene altavoz integrado para las alarmas de audio, así como acceso a WI-FI.
Su resolución térmica es de 160*120, la resolución óptica es de 8 MP y tiene un lente térmico de 6mm. La distancia recomendada es desde 1.5 hasta 3.0 metros para funcionar correctamente. Se puede instalar sobre un trípode.
Por su parte, la cámara tipo Turret tiene integrado un sistema de inteligencia artificial con el que reduce las falsas alarmas. Su resolución térmica es de 160*120, lente térmico de 4/6 mm y lente óptico de 6 mm. La distancia recomendada va desde los 0.8, 1.5 hasta los 3.0 metros. Cuenta con calibrador integrado y es posible adaptarla a un trípode y soporte.
La cámara tipo Bala tiene un calibrador Blackbody para aumentar la precisión de la toma de temperatura. También cuenta con detección de Inteligencia Artificial, resolución térmica de 160*120, lente térmico y óptico de 3/6 mm, y disponible desde una distancia de 0.8, 1.5 hasta los 3.0 metros.
Para este tipo de cámara existe una arquitectura que integra otro modelo de cámaras de tipo Bala, también térmicas de mejor calidad, integradas a un sistema DeepinMind NVR con Display interactivo y monitor.
El modelo de esta cámara Bala tiene una resolución térmica 384*288, lente térmico de 15 mm, lente óptico 6mm y la distancia recomendada es de 7.5 a 9 metros.
Un aspecto importante de las cámaras termográficas, es que puede detectar la radiación térmica que emiten los cuerpos debido al movimiento térmico que realizan sus moléculas. Lo que le permite medir el calor de objetos, mientras emitan ese tipo de radiación como los humanos, maquinaria, infraestructura, etc.
Los sensores térmicos que están integrados en todos los tipos de cámaras termográficas, capturan ese tipo de cambios en la radiación térmica, los traducen en grados de temperatura y muestran una imagen que marca esas diferencias por medio de colores.
Son muy eficaces e intuitivas para que sus análisis sean exactos y se reflejen correctamente en sus impresiones. Sin embargo, no es la única ventaja de las cámaras termográficas, a continuación te enlistamos las más importantes:
Las cámaras termográficas tardan un segundo en detectar la temperatura de cada individuo. En caso de encontrar a alguien con una temperatura más elevada del parámetro establecido, lo mostrará en el color de la imagen y sonará una alarma para hacerle saber al personal la situación.
Puede monitorear con rapidez y a una gran cantidad de personas, evitando la congestión al revisar la temperatura. Por lo que, se recomienda usarlas en lugares con largas filas como controles de aeropuertos, estaciones de autobuses y de trenes, centros de trabajo, fábricas, hospitales, escuelas, etc.
Entre los tipos de cámaras termográficas, existen opciones muy prácticas como las portátiles, las cuales logran la medición desde un metro de distancia, reduciendo el contacto físico al mínimo. Aunque la seguridad ante el contagio por COVID-19 no es lo único que ofrece.
También, son un sistema de vigilancia muy completo. No se ven afectadas por objetos que interfieren en su visibilidad, pues se sirven de la radiación térmica que producen las cosas. Es decir, son inmunes a las limitaciones visuales de otro tipo de cámaras.
Además, gracias a sus características pueden continuar monitoreando y generando imágenes nítidas en plena oscuridad, por lo que garantizarán la vigilancia ante cualquier intruso que produzca calor.
La inteligencia artificial que tienen integrada les provee de la capacidad para diferenciar entre los objetos que sí representan una amenaza y los que no.
Una cualidad muy distinta a otro tipo de sistemas de vigilancia que están basados en sensores de movimiento o infrarrojo que no distinguen aquellos objetos que implican una amenaza. Los sensores de las cámaras termográficas siguen parámetros establecidos para no errar.
Además de sus grandes beneficios, la inversión en una cámara termográfica es altamente rentable. No requiere de equipos extra, todo viene integrado y reduce la necesidad de personal físico para vigilar las instalaciones, fábricas, maquinaria, verificar productos, etc.
En Ak Digital puedes encontrar cualquiera de los tres tipos de cámaras termográficas. Si no estás seguro de cuál es la que necesitas, solicita una consultoría gratuita. Además, te apoyamos en la instalación y capacitación sobre su uso.