Tu empresa será más eficiente con los sistemas ERP y CRM. Conoce sus características para descubrir la herramienta ideal.
Una de las preguntas más comunes que tienen las empresas cuando comienzan a utilizar software para potenciar su crecimiento es qué diferencia hay entre sistemas ERP y CRM. La respuesta es muy amplia, tanto como los rangos que los vuelven distintos.
Estamos hablando de dos desarrollos que, aunque pueden compartir un objetivo final, que es hacer crecer a tu empresa, lo consiguen desde dos puntos de vista totalmente diferentes, siguiendo distintas rutas.
Para poner en contexto la situación, pregúntate: qué tan parecido es el trabajo del contador de tu compañía y el de uno de tus vendedores. Así de distantes son los usos que se deben dar a los sistemas ERP y CRM.
Este tipo de software es muy común en casi todas las empresas, ya que tanto uno como otro ayudan a tener una mejor administración de ciertos procesos.
Origen y características del ERP
Para entender mejor las diferencias entre sistemas ERP y CRM, veamos desde su origen hasta sus funciones y forma de trabajar.
Primero, el ERP significa Enterprise Resource Planning, planificación de recursos empresariales. Se trata de un software diseñado para administrar inventarios, así como los insumos para la fabricación de distintos productos en las plantas industriales de Estados Unidos en la década de los 70.
Posteriormente, conforme fue avanzando la informática y las computadoras se fueron desarrollando y comercializando más, el software se volvió más completo, ayudando a gestionar distintas áreas de la vida operativa de las compañías, como el departamento de compras.
Finalidad del ERP
La finalidad del ERP es optimizar los recursos para que los procesos operativos de una corporación sean más eficientes, es decir, que puedas administrar mejor tanto los recursos materiales como humanos para minimizar costos y tener un negocio más rentable.
Desde estas plataformas es posible gestionar el stock, realizar facturas, calcular y administrar nóminas, controlar flotillas, programar pagos y sintetizar las cadenas operativas en tu negocio.
De tal forma que el ERP actúa en la parte interna de tu organización para que puedas hacer más con menos, ya que es como tener varios asistentes trabajando juntos para lograr un control centralizado, lo que te permitirá gestionar tanto la administración como la operación de la empresa desde un mismo panel.
Origen y características del CRM
Por su parte, CRM son las iniciales de Customer Relationship Management, (sistema de gestión de relaciones con los clientes).
Se trata de una metodología basada en el uso de software que se comenzó a utilizar en Estados Unidos durante los años 90, precisamente para administrar carteras de clientes y llevar un mejor control sobre la prospección en las empresas.
Aunque la programación ha dado pasos agigantados en los últimos 30 años, la base del CRM continúa hasta la fecha, ya que opera sobre un sistema parecido a una agenda en el que se pueden ir sumando prospectos para visualizar durante todo el proceso de ventas.
Esta gestión es posible gracias a una plataforma que funciona como una agenda virtual en la que de forma sencilla y amigable, los ejecutivos llevan todo el proceso de ventas por medio de tareas configurables.
El CRM, usa un calendario con recordatorios y automatizaciones para que tus colaboradores puedan hacer su trabajo mucho más fácil y metódicamente. Es una herramienta que ayuda tanto a vendedores como a gerentes a dar un seguimiento oportuno de cada uno de los prospectos, para posteriormente poder hacer una evaluación sobre el embudo de ventas, campañas de mercadotecnia y todos los factores perfectibles.
Finalidad del CRM
El objetivo del CRM es optimizar la prospección para generar más ventas, y posteriormente lograr la fidelización del cliente. Esto lo logra mediante el uso de tableros que buscan la optimización de relaciones con el cliente.
Desde una plataforma como esta es posible automatizar algunos de los pasos a seguir durante el proceso de venta, de tal forma que se minimice la fuga de leads y se aprovechen todos los contactos del ejecutivo de ventas.
El CRM se enfoca en ayudar al equipo de ventas para que puedan dar un buen servicio tanto a la empresa como al cliente para conseguir más y mejores relaciones comerciales.
En conclusión
Como podrás ver, los sistemas ERP y CRM son excelentes herramientas para potenciar las capacidades de cada uno de los departamentos que integran tu empresa. Sin embargo, sus diferencias son más que sus similitudes.
Mientras el ERP se enfoca en vigilar los procesos internos para que la operación de tu negocio sea más eficiente y no desperdicies tu dinero, el CRM se encarga de vigilar, administrar y optimizar los procesos externos.
De tal forma que el primero te ayuda a ahorrar al interior de tu empresa y el segundo a ganar más dinero, por lo que son totalmente complementarios el uno con el otro.
Algunos desarrolladores, en su afán por generar un ERP más integral, han incluido algunas funciones del CRM, sin embargo lo recomendable es contar con una plataforma para cada misión.
Por lo tanto, un ERP debe ser utilizado por el personal administrativo de tu negocio, como el departamento de contabilidad, almacén o Recursos Humanos, mientras que el CRM está hecho para tu departamento comercial, principalmente para los integrantes de tu equipo de ventas.
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Antes de invertir en un sistema ERP o CRM, asegúrate de que el software cumpla con lo que demandas, ya que de nada te servirá contar con CRM si tu objetivo es mejorar el control de inventarios, por poner un ejemplo.
También es importante que si estás considerando implementar alguna de estas plataformas en tu empresa, te asegures de contar con un proveedor que pueda desarrollar los programas según las necesidades y características de tu empresa. Así como asegurar la compatibilidad entre uno y otro.
Si te gustaría tener una plática personalizada sobre los sistemas ERP y CRM, así como sobre las soluciones que AK Digital tiene para ti, no dudes en contactarnos.